Identificación de polillas comunes en casas y jardines
Las polillas son insectos nocturnos que muchas veces se asocian con la ropa guardada en armarios y cajones, pero en realidad, pueden aparecer en cualquier parte de la casa y jardín. En este artículo, hablaremos de las polillas más comunes que podemos encontrar y cómo identificarlas.
Polilla de la ropa (Tineola bisselliella)
Comenzamos por la polilla más conocida y quizás la más común. Es la polilla de la ropa (Tineola bisselliella), que se suele encontrar en armarios, cajones y otros lugares donde guardamos ropa. Es fácil de reconocer por su aspecto dorado o grisáceo y sus alas que parecen plumas. La larva de esta polilla suele alimentarse de tejidos de origen animal como la lana, seda o piel, por lo que si encontramos agujeros en nuestra ropa, puede ser la culpable.
Polilla de la comida (Plodia interpunctella)
Otra polilla que puede ser muy común en la cocina y despensa es la polilla de la comida (Plodia interpunctella). Esta polilla es fácil de identificar por sus alas grisáceas con manchas en forma de zigzag en tonos marrones. Aunque se llame polilla de la comida, no es excepcional que se encuentre en otros lugares de la casa y jardín, ya que puede alimentarse de muchas otras cosas, como frutas secas, especias, chocolates, etc.
Polilla de la harina (Ephestia kuehniella)
La polilla de la harina (Ephestia kuehniella) es una polilla que se encuentra comúnmente en la cocina. Es fácil de identificar por sus alas que tienen un patrón de líneas horizontales en tonos marrones. A diferencia de la polilla de la comida, esta polilla se alimenta principalmente de productos de origen vegetal, como harina, cereal, frutas, nueces y semillas.
Polilla del cacao (Ephestia elutella)
Otra polilla que se encuentra comúnmente en la cocina es la polilla del cacao (Ephestia elutella), que, como su nombre indica, se alimenta de granos de cacao y otros productos relacionados con el chocolate. Es fácil de reconocer por sus alas de color grisáceo con rayas onduladas en tonos oscuros.
Polilla de la edad (Tinea pellionella)
La polilla de la edad (Tinea pellionella) es una polilla que se encuentra comúnmente en casas con antigüedades y colecciones. Es fácil de identificar por sus alas doradas con flecos. Esta polilla se alimenta de pelo y piel de animales muertos, incluyendo cuernos y plumas.
Polilla de las alfombras (Trichophaga tapetzella)
La polilla de las alfombras (Trichophaga tapetzella) es otra polilla común en la casa. Es fácil de identificar por sus alas que parecen un abanico de colores marrones y su cuerpo alargado. Esta polilla se alimenta de pelos de animales y otros materiales en los que puedan esconderse sus larvas, incluyendo alfombras, tapices y cojines.
Cómo prevenir y controlar las polillas
Una vez que has identificado una polilla en tu casa o jardín, es importante tomar medidas de prevención y control para evitar que se extienda y cause daño. Aquí te damos algunos consejos útiles:
- Mantén la casa y jardín limpios y ordenados. Las polillas suelen esconderse en lugares sucios y desordenados, así que deshazte de cualquier material inservible y limpia regularmente los armarios, cajones y otras áreas que puedan servir de escondite para las larvas de las polillas.
- Sella bien los alimentos y otros productos. Las polillas se sienten atraídas por el olor de los alimentos, por lo que es importante guardarlos en recipientes herméticos. También asegúrate de revisar y desechar cualquier alimento que esté en mal estado o que hayan sido infestado por polillas.
- Refresca la ropa periódicamente. Si tienes ropa que has guardado por mucho tiempo, es una buena idea sacarla periódicamente al sol para refrescarla. Las polillas no soportan la exposición al sol y pueden morir si se les expone a él por varias horas.
- Usa trampas para polillas. Las trampas para polillas contienen feromonas que atraen a las polillas macho y evitan que se reproduzcan. Puedes colocarlas en lugares estratégicos, como armarios y despensa, para reducir la población de polillas en tu hogar.
- Usa productos repelentes. Hay muchos productos comerciales disponibles que pueden ayudar a repeler y controlar las polillas. Desde esencias naturales como la lavanda y el romero, hasta productos químicos más fuertes como insecticidas.
En conclusión, las polillas pueden ser una plaga común en cualquier hogar o jardín, pero existen medidas que se pueden tomar para prevenirlas y controlarlas. Conociendo las diferentes especies de polillas y sus hábitos de alimentación, podemos tomar medidas específicas para evitar su aparición y evitar que causen daño a nuestras pertenencias.